viernes, 31 de julio de 2015

LA “ESSEX” Y LA PATRIA VIEJA
                        Las guerras napoleónicas fueron un elemento catalizador del movimiento emancipador americano, al remover la monarquía española. Otra consecuencia de estas guerras en América fue la llamada “Guerra de 1812”. El 18 de junio de 1812 Estados Unidos declaró la guerra al Imperio Británico, puesto que impedía a los mercantes estadounidenses comerciar con el sistema continental de Napoleón, llegando a capturar varios barcos y aprisionar a sus tripulantes, para obligarlos a servir en la marina inglesa.
                        La joven marina estadounidense no podía medirse con la poderosa British Navy, pero contaba con fragatas sólidas y ligeras que produjeron grandes daños al comercio británico e hicieron tambalear el prestigio de la marina de guerra inglesa. Esta es la historia de una de dichas fragatas, que llevó el conflicto entre los anglosajones a las aguas chilenas.
La fragata "Essex" rumbo a las islas Galápagos
                        La “Essex” era una fragata de 47 metros de eslora por 12 metros de manga. Desplazaba 860 toneladas, tenía una tripulación asignada de 300 hombres y estaba armada con 26 cañones de 12 libras y 16 carronadas de 24 libras. Fue mandada a construir a fines del siglo XVIII por los patriotas estadounidenses de Salem (Massachusetts) que reunieron US$ 80.000 mediante una colecta popular. La nave, construida con roble blanco de Nueva Inglaterra era ágil y resistente y a comienzos del siglo XIX, bajo el mando del capitán Edward Preble convoyó a los buques mercantes estadounidenses que comerciaban con la Indias Holandesas Occidentales. En 1810 Asume su mando el capitán John Smith, ferviente partidario del combate naval a corta distancia, quien ordena cambiar los cañones de 24 libras por carronadas de 32 libras, con lo que dobló la potencia de fuego de la nave, pero redujo su alcance a la mitad. El exceso de peso, además redujo la velocidad de la fragata. Estos cambios no fueron del agrado del nuevo capitán que asumió en el verano de 1811, David Porter, pero no pudo convencer al gobierno para que reinstalara los cañones largos de 24 libras y debió iniciar su campaña en el Mar Caribe con este armamento el 3 de julio de 1812.
                        En dos semanas la “Essex” logra capturar 5 mercantes británicos, manteniendo prudente distancia de la fragata inglesa de 32 cañones “Minerve”. Dos presas fueron enviadas a Baltimore, dos fueron hundidas por no poder tripularlas y un barco fue destinado a llevar a las tripulaciones prisioneras a Terranova. El 13 de agosto captura la corbeta de 20 cañones “Alert”, luego de un breve cañoneo a corta distancia posible gracias a la estratagema usada por Porter de “disfrazar” su barco y tripulación de balleneros indefensos, ocultando los cañones para que el barco enemigo se acercara confiado en lograr una presa fácil.
                        Después de esta victoria, la primera que la marina estadounidense lograba contra la armada británica, Porter logró deslizarse entre el bloqueo inglés y anclar en la bahía de Delawere el 7 de septiembre de 1812. Luego de un mes de descanso, la tripulación de la “Essex” despliega nuevamente las velas, para dirigirse a las costas de Brasil a reunirse a las fragatas “Constitution” y “Hornet” que estaban atacando el comercio inglés con la América del Sur. Sin embargo, Porter no pudo encontrar a sus compatriotas y luego de capturar dos mercantes británicos se le informó que una importante flota enemiga venía desde el norte con la misión de eliminar a las fragatas estadounidenses que acosaban a los barcos comerciales ingleses. Ante esta noticia (que resultó ser falsa), Porter decidió pasar al océano Pacífico y reiniciar sus actividades contra los barcos balleneros, muchos de ellos armados en corso, enemigos.
Comodoro David Porter
1780-1843
                        En su travesía por el Cabo de Hornos la “Essex” casi naufraga azotada por una violenta tempestad que le causó severos daños, obligando a su capitán a dirigirse a Valparaíso para efectuar urgentes e imprescindibles reparaciones. El 15 de marzo los estadounidenses eran recibidos en el puerto chileno con repique de campanas y grandes demostraciones de amistad. La tradicional hospitalidad chilena estaba alentada por el cónsul estadounidense Joel S. Poinsett y la esperanza del gobierno de José Miguel Carrera de que Estados Unidos sería un aliado con la causa de la emancipación americana. Los tripulantes de la “Essex” fueron agasajados en Valparaíso y los salones de la sociedad santiaguina se abrieron a la oficialidad estadounidense. También la obtención provisiones y ayuda para la reparación de los daños de la fragata fue expedita y el 23 de marzo estaba en condiciones de reiniciar sus correrías.
                        Su primera presa fue el bergantín peruano “Nereyda”, que había hundido un ballenero estadounidense, cuya tripulación fue liberada. Entre estos estadounidenses estaba el piloto del ballenero, que ayudó a Porter en el resto de su travesía por el Pacífico. La nave peruana fue desarmada y  se le permitió volver al Perú con su tripulación. Ya en el archipiélago de las Galápagos, la “Essex” inició sus ataques contra los balleneros británicos. El 29 de abril capturó tres barcos: “Montezuma”, “Georgiana” y “Politics”. El “Georgiana” de 280 toneladas se armó como balandro de guerra con 10 cañones (6 de 18 libras y 4 de 6 libras) y bajo el mando del teniente  John Downes partió el 9 de mayo hacia la isla James (actual isla Santiago), en cuyas aguas el 28 de mayo capturó los bergantines “Catherine” de 270 toneladas y “Rose” de 220 ambos armados con 8 cañones y que actuaban como balleneros o corsarios según las circunstancias. Al anochecer del mismo día apareció el “Héctor”, de similares características y armado con 11 cañones. Luego de una larga persecución y un corto combate nocturno, el corsario inglés perdió la mayoría de sus velas y el palo mayor, siendo abordado por los estadounidenses. El  mismo día, Porter había capturado al “Atlantic”, ballenero armado con 6 cañones de 18 libras y al “Greenwich” de 338 toneladas, que debió ser desarbolado con una andanada de las carronadas cuando intentaba escapar. Estos barcos estaban cargados con abundantes materiales para reparar embarcaciones y muchos marineros estadounidenses capturados o enrolados a la fuerza, por lo que Porter se encontró al mando de una importante flotilla. A fin de liberar a los más de 100 prisioneros ingleses que tenía en su poder se dirigió a las costas peruanas (Tumbes en el extremo norte del litoral del actual Perú), donde aprovechó, el 19 de junio, de vender uno de los barcos capturados.  El 24 de junio se le reunió Downes con sus tres presas. En dos meses los estadounidense habían captura 8 barcos enemigos y Porter decidió reorganizar su flotilla, rebautizado el “Atlantic” como “Essex junior”, fue armado con 20 cañones y al mando de Downes fue enviado a Valparaíso para vender la carga de aceite de los balleneros y 4 presas. La “Essex” y los balandros de guerra “Georgiana” y “Greenwich”, ambos armados con 10 cañones retomaron rumbo a las Galápagos.
Imagen satelital de las islas Galápagos
                        Downes llegó a Valparaíso el 12 de agosto y, aunque se reiteraron los agasajos y muestras de amistad, no pudo cumplir su propósito. El país estaba en guerra y el general Carrera con el cónsul Poinsett se encontraban con el ejército en el sur. Aunque algunos entusiastas patriotas consideraron la posibilidad de adquirir algunos barcos para reconstituir la flotilla perdida, se encontraron con que la guerra  tenía al borde de la ruina al gobierno y a los particulares, además la Junta de Gobierno chilena recibió una advertencia de su homónima argentina, en el sentido de mantener la neutralidad y evitar la molestia (y posibles represalias militares) de la corona británica al permitir la venta en puertos chilenos de los buques y mercancías capturadas. La advertencia argentina estaba acompañada por la noticia del arribo a Buenos Aires de la flotilla del comodoro Hillyar destinada a pasar al Pacífico para detener las actividades de la “Essex”. Downes era un hombre de iniciativa y cargó al “Politics” con todo el aceite capturado y lo envió por el Cabo de Hornos de vuelta a estados Unidos. Dejó los tres barcos restantes anclados en Valparaíso e izó las velas en dirección a las Galápagos para llevar las infaustas noticias a Porter.
                        La fragata “Essex” y sus dos compañeros encontraron en las aguas de las islas Charles (Actual Floreana) a tres balleneros/corsarios ingleses e iniciaron una rápida persecución el 14 de julio de 1813.  El bergantín de 10 cañones “Charlton” fue el primero en ser alcanzado y arrió su bandera a la “Essex” sin combate. El “Georgiana” al mando del capellán de la “Essex” Mr. Adams fue quedándose atrás y solo el “Greenwich” al mando del teniente de “marines” John Gamble y con solo 14 tripulantes logró dar alcance a la “Seringapatan” de 357 toneladas, 14 cañones de 9 libras y 41 tripulantes. Viendo el escape imposible, el capitán Stavers se dirigió en un resuelto ataque contra el barco de Gamble, pero este detuvo su andar para esperar al “Georgiana” y transbordar algunos tripulantes para empeñar la acción. Stavers creyó tener una nueva oportunidad de fuga y largo sus velas, pero el “Greenwich” le dio alcance y luego de un intenso combate con cañones y armas ligeras a distancia de tiro de pistola, los ingleses arriaron su bandera. Mientras, la “Essex” había capturado sin combate al pequeño “New Zealander” armado con 8 cañones.
                        Porter desarmó el “Charlton” y embarcó a 48 de los 98 prisioneros ingleses que bajo palabra se dirigieron a Río de Janeiro a entregarse a la primera autoridad estadounidense que encontraran (bajo la ley náutica de la época estos barcos se llamaban “Cartel” y no podían ser atacados, ni capturados, hasta que sus tripulantes cumplieran con su palabra empeñada). El “Georgiana”, dada su escasa capacidad combativa se cargó con el aceite de ballena capturado y se envió de vuelta a los Estados Unidos, pero la flotilla de Porter fue nuevamente aumentada con la captura del “Sir Andrew Hammond” el 15 de septiembre. El 30 del mismo mes la “Essex junior” alcanzó a Porter y le informó de la próxima presencia de los barcos de guerra ingleses. El capitán estadounidense, viendo el cansancio de su tripulación y el deterioro de su fragata decidió poner rumbo al oeste para reacondicionar sus buques en las Islas Marquesas (actual Polinesia Francesa).
                        El 25 de octubre de 1813 los buques estadounidenses anclaban en una bahía de la isla Nuku Hiva, la mayor de las Marquesas. Sin considerar que estaba habitada por varias tribus, tomo posesión de ella en nombre de los Estados Unidos y la bautizó como “Isla Madison” en honor a su presidente, la bahía se nombró de “Massachusetts” y construyó en una altura un fuerte (Fort Madison) de 4 cañones para proteger la villa en que vivía su tripulación (Madisonville). Gracias a un inglés de apellido Wilson que vivía en la isla e hizo de intérprete, Logró que Gattanewa, jefe de los Te L’is, autorizara su permanencia a cambio de aliarse en su guerra contra la tribu de los Happah. Así, luego de limpiar los fondos de la “Essex” y eliminar con humo más de 1000 ratones que consumían los aparejos de repuesto y provisiones en sus bodegas, Porter se involucró en la guerra de los lugareños.
La flotilla de Porter en la bahía de Massachusetts de la isla Nuku Hiva. Fort Madison con la bandera estadounidense sirve de protección de Madisonville a derecha.
                        En una primera expedición a través de la jungla y empinadas montañas, el teniente Gamble con 40 marines y un cañón de 6 libras, junto a varios miles de Te L’is asaltaron y capturaron un fuerte defendido por cerca de 4000 Happah. Luego de esta derrota, los Happah pidieron la paz y se unieron como aliados para luchar contra la tribu de los Tai Pi.
Teniente John Gamble
1791-1836
                       Esta vez la flotilla estadounidense y 200 canoas transportaron a 5000 guerreros hasta la costa de los Tai Pi. Luego de un desembarco sin oposición los guerreros y 36 estadounidenses y un cañón dirigidos por Porter fueron emboscados en la selva y luego rechazados en un ataque a un fuerte. Los hombres de Porter se retiraron luego de agotar sus municiones y del desbande de los guerreros Happah y Te L’i quedaron inermes, pero lograron volver a sus barcos, luego de perder un hombre, arrastrando a dos heridos (uno de ellos era el teniente Downes con una pierna fracturada). Porter regresó a Madisonville, pero debió reiniciar la campaña para confirmar a los guerreros locales la superioridad de sus fuerzas y evitar ser masacrado. Esta vez avanzó por tierra, solo con los Te L’i, pero llevando casi todos sus marinos y marines. El 30 de noviembre fueron nuevamente emboscados, pero lograron ocupar un buen lugar estratégico para iniciar una ofensiva que devastó al país Tai Pi, obligando a sus habitantes a pedir la paz.
                        Considerando la situación controlada, Porter se dispuso a reiniciar sus ataques al comercio británico, pero hubo un conato de motín en la “Essex junior”, pues algunos marineros deseaban quedarse a vivir en aquel paraíso tropical. Porter demostró su temple, caminando tranquilamente entre los amotinados con un barril de pólvora bajo el brazo hasta la escotilla del arsenal del barco. Encendiendo la mecha del barril les gritó a los amotinados que si no deponían su actitud “volarían todos juntos hacia la eternidad”. Los amotinados reafirmaron su lealtad al capitán y entregaron al marino inglés Robert White como instigador del motín. Porter blandiendo su espada le gritó que huyera por su vida y White no se hizo de rogar, saltando por la borda y nadando hasta la costa.
                        El 9 de diciembre de 1813 la “Essex”, junto al “Essex junior” y el”New Zealander” partieron hacia las costas de Chile, dejando en Madisonville al teniente Gamble, 2 guardiamarinas, 19 marinos y 6 prisioneros ingleses. En la bahía de Massachusetts permanecieron anclados el “Seringapatan”, el “Sir Andrew Hammond” y el “Greenwich”.
                        Juego de una corta estadía en la isla Mocha, Porter envió al “New Zealander” de vuelta a Estados Unidos y se dirigió a Valparaíso a recuperar los 3 barcos que no habían podido ser vendidos, sin embargo su suerte lo había abandonado: Ingresó al puerto el 3 de febrero de 1814 y 5 días después fue sorprendido por la llegada de la fragata de 36 cañones “Phoebe” y el balandro de 18 cañones “Cherub” mandados por el comodoro Hillyar. Los 4 barcos permanecieron anclados en la bahía casi por 2 meses. Los capitanes enemigos se reunían en la casa del cónsul poinsett y las tripulaciones rivalizaban cantando  “Yankee Doodle” los estadounidenses y “The sweet Little cherub that sits up aloft” los ingleses. Los primeros enarbolaban una bandera con la consigna “Libertad de comercio y los derechos de la gente de mar” y los británicos la “Union Jack” con el logo “Dios y patria. Los marineros británicos tienen la mejor ley. Los traidores nos insultan”. La neutralidad del puerto chileno impedía entablar combate, pero la situación era tensa. A fines de marzo, empezaron a arreciar los vientos del sur y Porter decidió intentar la fuga. A mediodía del 28 de marzo de 1814 despegó todas sus velas y dirigió a la “Essex”, seguida por la “Essex junior” hacia la salida de la bahía de Valparaiso, pero al abandonar el reparo del puerto el fuerte viento quebró el palo mayor de la fragata, quedando prácticamente inmovilizada. Los buques británicos supieron mantener su distancia e iniciaron un implacable cañoneo que no podía ser contestado por las carronadas de corto alcance de la fragata inmovilizada. El desigual y unilateral combate se mantuvo por dos horas y media, hasta que la explosión del polvorín de la “Essex” convenció a su capitán que todo estaba perdido y arrió su bandera. Habían muerto 58 de sus hombres y 45 estaban heridos, los ingleses tomaron 156 prisioneros (Porter cuenta 31 desaparecidos, entre los que pueden haber algunos que fugaron nadando hacia la costa, pero lo más probable es que fueran destrozados por la explosión del polvorín) incluyendo la tripulación de la “Essex junior” que se entregó sin combate y, convertida en Cartel trasladó a los heroicos sobrevivientes de vuelta a su país. Los ingleses perdieron 5 muertos y 10 heridos.
                        Así termina la historia de Porter y la fragata “Essex” en aguas chilenas durante la Patria Vieja, pero ¿Cuál fue el destino final de estos “Hombres de hierro y barcos de madera”?:
  •           El teniente John Gamble fue sorprendido el 7 de mayo de 1814 por un motín encabezado por sus marineros ingleses que liberaron a sus connacionales prisioneros y escaparon en el “Seringapatan” hacia Australia y de ahí a Inglaterra, donde devolvieron el buque a sus dueños. Gamble fue herido en un pie y mientras se recuperaba a bordo del “Sir Andrew Hammond” Los Te L’i atacaron, azuzados por Wilson, a los marinos estadounidense en la playa el 9 de mayo, matando a un guardiamarina de 16 años y 4 marineros. Gamble recogió a los 7 sobrevivientes y luego de quemar al “Greenwich” levó anclas y se dirigió a Hawai. Luego de una travesía de 2500 millas fue capturado por el “Cherub”. En 1815 pudo regresar a su país. En 1827 alcanzó el grado de teniente coronel y falleció en New York en 1836, tenía 45 años.
  •      El teniente John Downes Fue ascendido a capitán a su vuelta a Estados Unidos y tuvo una provechosa carrera naval, enriqueciéndose y alcanzando el grado de comodoro. Murió en Charleston, Massachusetts a los 68 años de edad.
  •     El capitán David Porter fue ascendido a comodoro y en 1815 inició una campaña contra los piratas de las Indias occidentales. Debido a un ataque no autorizado al pueblo de Fajardo en Puerto Rico (para rescatar un oficial retenido por las autoridades locales) fue enjuiciado por una corte marcial y obligado a renunciar en 1826. Desde este año hasta 1829 fue comandante en jefe de la marina mexicana, volviendo a Estados Unidos para ser nombrado embajador ante el Imperio Otomano. Falleció en Constantinopla en 1843 a la edad de 63 años.
  •      El Comodoro James Hillyar continuó una brillante carrera naval hasta 1830, retirándose con el grado de almirante y con los títulos de caballero de la Real orden Guelfica y de la Real orden del Baño. Murió el mismo año que Porter. Tenía 74 años.
  •      La fragata “Essex” continuó sirviendo en la marina británica como HMS “Essex”, navío de 42 cañones, pero no tuvo servicio activo, sino que se destinó como barco-prisión hasta 1837 en que fue vendida a particulares… Cruel y muy británico castigo para esta orgullosa nave. La marina Estadounidense ha perpetuado su nombre en 4 buques, incluido un porta-aviones.
  •      El “Essex junior” llegó a New York en julio de 1814 y fue vendido a privados en agosto del mismo año en US$ 25.000.
  •          El “Cherub” continuó activo y en 1818, en una de sus travesías capturó El “Josefa”, transporte de esclavos español, liberando a 35 esclavos en Freetown, Sierra Leona. Sin embargo, al no existir tratado anti-esclavista entre Inglaterra y España, el propietario del “Josefa” ganó una demanda por £ 21.180 contra el capitán George Willies. En 1820 el Cherub fue vendido en £ 940.
  •           La fragata “Phoebe” Siguió el destino de su enemiga (la “Essex”) y no volvió a servir en el mar después de su retorno a Inglaterra en 1814. Fue vendida en 1841 por £ 1750.

                        La base de esta recopilación de datos es el libro de Henry Gruppe: “The Frigates (The Seafarers)”. Las imágenes y mucha información complementaria se obtuvo de Wikipedia (English). En la “Historia Jeneral de Chile”, Barros Arana comenta los aspectos de la relación del gobierno de Chile con Porter en los capítulos 12 y 17. Por último, Piero Castagneto publicó “Batalla de Valparaíso. 28 de marzo de 1814” (Legatum Editores), que no he leído, pero está disponible en la Feria Chilena del libro. Es una versión bilingüe en español e inglés.